La despensa imprescindible

Sabemos que llevar una buena planificación es ventajoso en casi todos los aspectos de nuestro día a día, y la alimentación no es una excepción. Pero a todos nos pasa que la falta de tiempo hace que a veces vayamos a última hora y nos planteemos… ¿Estamos realmente comprando de forma inteligente? ¿A quién no le ha pasado de hacer la compra en el supermercado “a ojo” y luego nos sobra o falta comida para cocinar menús completos y equilibrados?
Para procurar ser los más eficientes posibles en nuestra compra semanal y en la cocina, hoy os proponemos ideas de lo que debería ser el “fondo de despensa” de nuestros hogares.
Una despensa básica implica tener aquellos alimentos de una duración mediana-larga en la cocina, para así disponer siempre de ingredientes de buena calidad a mano. Con ellos, se pueden crear comidas simples, rápidas y saludables. Tener una despensa equipada (nevera, congelador, armarios, estantes…) nos permitirá simplificar las compras diarias o semanales, puesto que sólo compraremos aquellos artículos frescos junto con reposiciones puntuales de dicha despensa.
Los alimentos que no deberían faltar en casa (con sus lógicas variaciones según gustos y costumbres) son los que aparecen en la siguiente infografía: