Circuitos de tubos de papel, un circuito autoconstruido ¡para jugar y cuidar el planeta!

Juego con tubos de cartón como descrito en el texto
21/06/2018
  • Categoría: Juego de ejercicio (para los más pequeños cuando lo construye el adulto). Juego de construcción (si lo hacen ellos mismos).
  • Edad recomendada: De 3 a 8 años
  • Nº jugadores: 1 – 2 jugadores
  • Material necesario: tubos de cartón de diferentes tamaños, cinta adhesiva de velcro (o cinta doble cara), caja tamaño de zapatos (dependiendo de la extensión del circuito) y material para decorarlos. Habrá tijeras y elementos para pasar por el circuito (bolitas de papel de aluminio, balas de colores, bolas de papel...).
  • Tiempo de juego: ¡lo que ellos decidan!

Capacidades que potencia:

  • Actividad individual y asociativa.
  • Coordinación y organización espacial
  • Coordinación mano-ojo
  • Atención
  • Creatividad
  • Razonamiento

Con los tubos de papel se pueden crear tantos juegos como se desee. En este circuito hecho con tubos de diferentes tamaños, pueden pasar balas, pequeños coches, piedrecitas... Y además se puede decorar, teniendo una doble experiencia de juego.

Se puede pegar en una puerta o en un cartón grande con velcro (para que sea el niño quien lo construya) o cinta de doble cara. Es un material que se puede acumular fácilmente en casa, puede tener diferentes tamaños, es maleable y al ser de cartón es fácil de decorar.

Los tubos de papel permiten hacer infinidad de juegos y juguetes. Algunas propuestas: tapando los agujeros con cartón se pueden apilar o si se hacen cortes verticales de 2 cm se pueden insertar entre ellos. También se pueden pintar como si fueran personajes y hacer un cuento o rellenarlos con papel y hacer una pirámide para hacer un juego de lanzamiento con una pelota.

Valores educativos y de salud

El juguete autoconstruido tiene un alto valor educativo, ya que el juego comienza en el mismo momento en que el niño está imaginando qué creará. Además, el uso de material de desecho nos permite introducir a los niños en la conciencia ecológica de la reutilización de una manera lúdica y divertida.

Un juego hecho por ellos tiene la ventaja que les permite valorar tanto el proceso como el resultado, aumentando su autoestima ya que les vincula con el juguete hecho, permitiendo el desarrollo de la creatividad.

El juego de circuito, a pesar de ser sencillo, les permite desarrollar la coordinación espacial y la psicomotricidad fina al introducir las piezas. La caída de las bolas es una divertida manera de introducir al niño en un razonamiento básico, realizando hipótesis sobre el resultado. Antes de tirar las bolas, deberán analizar la situación y planificarla.

Juego recomendado por:

Marinva – Joc i Educació