El consumo de tabaco crece entre los adolescentes

Adolescente fumando
Fecha: 
20/02/2020

El porcentaje de adolescentes entre 14 y 18 años que fuma tabaco a diario aumentó en 2018, rompiendo con la línea descendente de los últimos tiempos.

Este dato, conocido a partir de la encuesta sobre Consumo de Drogas en la Educación Secundaria en España, que fue presentada por el Ministerio de salud, demuestra que la cifra de consumo ha aumentado del 8,8% en 2016 a un 9,8% el año pasado. Esto evidencia un cambio de tendencia ya que este es el primer aumento desde el 2012. Entre los años 2004 y 2014 se apreció un descenso considerable (del 21'5% al 8'9%) y a partir de 2014 se produjo un estancamiento.

Los datos de la encuesta

La encuesta, llevada a cabo en más de 38.000 estudiantes en 917 centros públicos o privados, permite dibujar una radiografía del uso de drogas entre los jóvenes. El alcohol (75,9%), seguido del tabaco (35%) y el cannabis (27,5%), fue el más consumido durante los últimos doce meses.

El alcohol es la sustancia psicoactiva más consumida entre los estudiantes de enseñanzas secundarias de 14 a 18 años. La segunda droga de mayor prevalencia entre los estudiantes es el tabaco. El 41,3% ha fumado tabaco alguna vez en la vida, el 35% en el último año y el 26,7% en los 30 días previos a la realización de la encuesta. Aproximadamente una tercera parte de los jóvenes que han fumado en el último mes lo ha hecho de forma diaria.

Los expertos consultados alertan de que el tabaquismo persiste entre los adolescentes. Especialmente si el tabaco tradicional se añade el consumo de nuevas formas de uso, como es el consumo de e-cigarrillos. Hace tres años, uno de cada cinco adolescentes reconoció haber consumido e-cigarrillos, mientras que el año pasado fue casi la mitad.

El peligro de los e-cigarrillos

"El vapeo es la puerta de entrada al uso regular del tabaco", explica Lucía Goret, médico de familia y delegada de la Comisión de prevención y tratamiento del tabaquismo en las Islas Baleares. Y no solo habla de los adolescentes que abandonan el e-cigarrillo por el tabaco tradicional, sino de los que simultanean ambos consumos. También es el punto de partida que puede llevarlos al consumo de drogas como el cannabis.

El 5,4% de los encuestados que informó de tomar esta sustancia en el último mes, explicó haberlo hecho a través de e-cigarrillos (en 2016 fueron 1,8%). "Hay nuevas formas de consumo, como las cachimbas (el 47,4% dijeron que habían consumido tabaco a través de cachimbas)", continúa.

La industria del tabaco avanza. Hay un poco de relajación desde que la Ley 2010 salió: estas nuevas formas se permiten en lugares donde está prohibido fumar y, mientras la publicidad del tabaco está prohibida, no lo está la de estos aparatos, que se pueden ver incluso en las marquesinas de autobús.

Además, el vapeo se ha vendido como un tabaco inocuo cuando no lo es. Actualmente se conocen algunos de los efectos más negativos como son las muertes (EEUU), pero hay otro problema de fondo que son las sustancias que se depositan en los pulmones y que éste no es capaz de hacer desaparecer, provocando enfermedades crónicas.

¿Cómo afecta el consumo del tabaco en los adolescentes?

Sabemos que el inicio del uso de cigarrillos es a los 14,1 años. Poco más de medio año después de este primer cigarro, se consolida el consumo diario, que de media se establece en los 14,7 años. Esto es, a pesar de que casi el 94% de los encuestados consideran que fumar un paquete de tabaco al día conlleva graves riesgos para la salud.

Los expertos recuerdan sobre los peligros de iniciarse en el consumo de tabaco a una edad tan joven, cuyo pulmón aún no se ha terminado de formar, todavía está en fase de crecimiento y su capacidad pulmonar aún no es del 100%. Entonces, cuando más adelante aparecen los problemas, los jóvenes que han comenzado a fumar a una edad temprana ya parten de una capacidad pulmonar por debajo del 100% y es probable que sufran más dificultades para llevar una vida normal.

¿Cómo podemos detener este crecimiento?

Los expertos enfatizan la necesidad de implementar nuevas medidas. Rodrigo Córdoba, del Comité Nacional para la prevención del tabaco afirma que es necesario "subir los precios del tabaco, porqué una caja puede costar cinco euros aquí y diez euros en Francia”. Pero también hay que aumentar la fiscalidad, la campaña o el diseño de un embalaje genérico "para revertir el cambio de tendencia".

Varios expertos y campañas coinciden: hay que hacer campañas específicas en los centros educativos y explicar a los adolescentes con claridad cuáles son las consecuencias de fumar y cómo funcionan las empresas tabacaleras.

Acceso a las fuentes de consulta:

El consumo de tabaco se perpetúa entre los adolescentes. El País.

Encuesta sobre Uso de Drogas en Enseñanzas Secundarias en España (ESTUDES) 1994-2018. Ministerio de Sanidad, Consumo y Bienestar Social.