Ventajas de la atención sanitaria en pediatría: el pilar de la salud de nuestros hijos

12/01/2016

La atención primaria de salud es aquella que prestan profesionales sanitarios (médicos, enfermeras, auxiliares, psicólogos, matronas, trabajadores sociales, odontólogos…) en los centros de atención primaria (CAP).

En el caso de la salud infantil, en nuestro ámbito sanitario a cada niño recién nacido se le asigna un médico pediatra y una enfermera de referencia en el CAP correspondiente a su domicilio. Ambos son los responsables de realizar los controles de salud, la vacunación sistemática y la asistencia sanitaria del niño en su CAP desde su nacimiento hasta los quince años, edad en que la asistencia sanitaria pasa a prestarla el médico de familia.

Ventajas de los CAP para la salud de los niños:

La atención de salud infantil en los CAP aporta muchas ventajas, entre ellas:

  1. Es más cercana y accesible al domicilio familiar. El trato continuado hace que el niño y su familia conozcan al pediatra y la enfermera, lo cual agiliza la atención y resulta más fácil para el niño, que está familiarizado con ambos, y permite establecer una relación de confianza. 
  2. Asegura una continuidad en la asistencia. El seguimiento de un problema de salud (fiebre, una herida…) por un único pediatra o enfermera facilita la toma de decisiones del profesional sanitario y ofrece tranquilidad a la familia, que en otras circunstancias puede recibir información discrepante sobre el diagnóstico o el tratamiento si la asistencia es realizada por más de un médico.
  3. Una atención dirigida a la prevención y detección precoz de enfermedades y a la promoción de hábitos de vida saludables.
  4. La atención por un equipo de profesionales que asegura:
  • La asistencia en caso de ausencia de su pediatra.
  • La atención en caso de ser necesarias técnicas diagnósticas o procedimientos sencillos, tales como analíticas de sangre y orina, vendajes, curas de heridas, y en el caso de algunos CAP, radiografías o atención por otros especialistas sanitarios. 
  • La atención bajo unos protocolos o guías clínicas de equipo basadas en evidencias científicas, que den uniformidad y rigurosidad a la atención sanitaria que se presta.
  • Una derivación adecuada y coordinada para la valoración por otros especialistas pediátricos, en caso de resultar necesario.

En general, todos los centros de atención primaria públicos cumplen estos requisitos, pues están sujetos a unas normas de funcionamiento y a unos controles de calidad asistencial homogéneos.

En el caso de optar por una asistencia privada, con posibilidad de coberturas y prestaciones más heterogéneas, hemos de valorar estos y otros factores para realizar la elección más adecuada en cada caso.

  1. La asistencia coordinada con otros servicios de la ciudad, como por ejemplo con las escuelas, donde los profesionales del CAP realizan charlas o talleres sobre salud y donde se lleva a cabo la vacunación sistemática a los 12 años.  
  2. Asimismo, muchos CAP ofrecen periódicamente la posibilidad de asistir a talleres para padres, y algunos también para niños, destinados a ayudar a las familias a trabajar y mejorar los diversos factores que determinan su salud. Así, son frecuentes los talleres sobre lactancia materna, alimentación, actividad física, afectividad, sexualidad, adicciones…
  3. También es importante tener en cuenta que la atención de un niño con una dolencia leve (fiebre, síntomas catarrales o gripales, dolores leves, diarrea…) en su CAP implica un menor coste económico para la sanidad pública que la atención que se presta en los servicios de urgencias pediátricas, cada vez más frecuentados por su accesibilidad, a la vez que se evita el colapso de los mismos en épocas de epidemia.