La vacunación infantil en tiempos de pandemia por coronavirus
El brote por coronavirus (SARS-CoV2) está alterando nuestras vidas y ha provocado en algunas familias cierto miedo al contacto con los centros de salud, comportando en ocasiones un retraso de las vacunaciones infantiles.
Asimismo, también los pediatras han optado por priorizar algunas vacunas y demorar otras para limitar el acceso a los centros de salud a los pacientes que más lo necesiten. Pero la realidad es que es importante, ahora más que nunca, recuperar las vacunaciones perdidas y mantener el calendario revisado y al día. También en ocasiones, mediante soportes informáticos, como historias clínicas compartidas y algunas aplicaciones específicas (App Vacunas en Andalucía, VacGal en Galicia, App Vacunas Infantiles…).
Manteniendo el calendario al día, los niños estarán protegidos de enfermedades infecciosas, ahora poco comunes en nuestro país gracias a la vacunación. Si las personas no estuvieran vacunadas, éstas se pueden propagar rápidamente en forma de brotes y con consecuencias más graves en la edad infantil.
Tras la salida del estado de alarma, las diferentes comunidades autónomas (CCAA) en función de su riesgo actual de rebrote, han modificado y adaptado sus recomendaciones en cuanto a la sistemática de vacunación y el modo de atender a los pacientes. Supondrá un esfuerzo adicional por parte de todos, instituciones, profesionales y población, recuperar estas dosis de vacunas atrasadas, pero se está haciendo un buen trabajo para asegurar la vacunación de ciertas franjas de edad y vacunas no demorables.
Debido a la pandemia, estos últimos meses el Ministerio de Sanidad y la Sociedad Española de Inmunología (SEI), la Sociedad Española de Infectología Pediátrica (SEIP) y la Asociación Española de Pediatría a través de su Comité Asesor de Vacunas (CAV-AEP), proponen una serie de recomendaciones para mantener una buena cobertura vacunal en España:
Buscar información en fuentes fiables de las autoridades nacionales y locales y contactar por teléfono al propio centro de salud, evitando acudir a los centros sanitarios sin cita previa.
Algunas vacunaciones pueden ser demoradas durante algunas semanas o meses sin riesgos remarcables, siendo rescatadas cuando la evolución de la epidemia en cada región permita su normalización.
Se seguirán la medidas de seguridad habituales actuales, valorando el riesgo-beneficio de acudir al centro sanitario. Se administrarán en lugares limpios del centro de salud y promoviendo las administraciones de varias vacunas al mismo tiempo, para mejorar la cobertura, evitar elevadas consultas ambulatorias presenciales, minimizar contactos sociales…).
Mantener siempre que sea posible las vacunaciones infantiles sistemáticas (del calendario oficial recomendado por el CAV-AEP y las no financiadas que estén indicadas como rotavirus, meningococo B y meningococo tetravalente). Se priorizará la vacunación (financiadas y no financiadas) de los menores de 15-18 meses, sobre todo las de 2 y 4 meses de edad; de la triple vírica de los 12 meses de edad; vacunación de los pacientes con enfermedades crónicas o inmunodeprimidos (sobre todo niños en tratamiento con eculizumab y trasplantados); a los convivientes de personas (niños y adultos) de mayor riesgo y a las mujeres gestantes.
Se dará prioridad a personas de cualquier edad, que precisen vacunación por brotes epidémicos y postexposición no demorable (por ejemplo sarampión o casos de meningitis).
Según la experiencia acumulada, los niños que hayan superado la infección aguda por el nuevo coronavirus, podrán seguir con las vacunaciones sin necesidad de esperar.
De forma general se ha de evitar demorar las siguientes vacunas establecidas como sistemáticas por parte de los expertos nacionales:
2 meses: hexavalente (difteria, tétanos, tosferina, poliomielitis, Haemophilus influenzae tipo b, hepatitis B) y neumococo.
4 meses: hexavalente, neumococo y meningococo C.
11 meses: hexavalente y neumococo.
12 meses: triple vírica (sarampión, rubeola y parotiditis) y una dosis del meningococo C o la de meningococos ACWY (ya establecida dentro del calendario en varias comunidades autónomas en sustitución de la MenC habitual hasta el momento).
Tampoco deben demorarse, como mucho unas semanas, la vacuna de la varicela de los 15 meses y otras vacunas en menores de 15 meses que podrían ser administradas, si las condiciones de los puntos de vacunación lo admiten y no hay restricciones especialmente amplias.
Desde el año 2013 el Ministerio recomendó para toda España un calendario vacunal tras unificar criterios para acabar con las desigualdades que existían entre las diferentes CCAA. Asimismo, los pediatras de la Asociación Española de Pediatría (AEP) defienden un calendario de vacunaciones único para toda España, del cual estamos cada vez más cerca. A pesar de ello, actualmente en España hay 19 calendarios diferentes, con variaciones en las vacunas financiadas o no por el Sistema Nacional de Salud y con algunas pequeñas diferencias en las franjas de edades. En este enlace te mostramos todos los calendarios existentes actualizados para su consulta tanto por CCAA, el calendario común del Ministerio, el recomendado por la AEP para el 2020 y los buscadores de los calendarios de Europa y el mundo.
¿Y qué pasa con la vacuna del coronavirus? ¿Se la pondrán a mi hijo? Muchos padres se preguntan cuándo habrá una vacuna contra el coronavirus (SARS-CoV2) y si ésta será universal para toda la población. Científicos de todo el mundo están trabajando intensamente para desarrollarla, pero de momento, sabemos que aún quedan varios meses o años para su distribución universal. Aun así las familias deben estar tranquilas, dado que se conoce que la enfermedad en la mayoría de los casos infantiles suele cursar de forma asintomática o con manifestaciones leves y su recuperación en la mayoría de casos es espontánea.
Y no nos olvidemos, este año más que nunca, de la importancia de vacunarse de la gripe en aquellos casos en pediatría que esté indicado. De esta manera evitaremos tensionar aún más al sistema sanitario y la coinfección con el coronavirus, que a pesar que ambas infecciones generalmente son leves en los niños, podrían crear confusión por tener síntomas similares.
Aunque sabemos, tal como dice el CAV-AEP, que sería recomendable para los niños mayores de 6 meses sanos, de momento será prioritario garantizar el acceso de vacunas para la gripe para esta próxima campaña para las personas mayores, algunos grupos de riesgo específico como los sanitarios y niños y adultos con enfermedades crónicas con riesgo de infección grave por gripe.
Dichos grupos también serán los prioritarios tras el descubrimiento de la tan esperada vacuna para el coronavirus (SARS-CoV2). Este brote nos recuerda lo afortunados que somos al tener ciertas vacunas, normalmente muy seguras y con escasos riesgos (reacciones poco frecuentes, leves y temporales, como dolor de la extremidad o febrícula puntual). Sabiendo que las reacciones graves son extremadamente raras, es de vital importancia mantener el calendario actualizado de nuestros hijos, no sólo para su protección individual, sino también porque vacunarse es un acto de solidaridad con toda la sociedad!
Esta información es de carácter divulgativo y no sustituye la tarea de los equipos profesionales de la salud. Si necesitas ayuda, ponte en contacto con tu profesional de referencia.
Cuando tu hijo llega de la escuela y presenta fiebre y le duele la garganta, seguramente te preguntarás: ¿será solo un resfriado o es la gripe? Consulta cómo diferenciar los síntomas de cada una de estas enfermedades.
La gripe es una enfermedad muy común que, en algunos casos, puede llegar a ser grave en los niños. Te ofrecemos todas las pistas para prevenirla: cuándo vacunarse, cómo tratar los síntomas y qué fármacos son realmente eficaces para combatirla.
El otoño y el invierno son la época del año en que los niños más enferman. Consulta cuáles son las principales enfermedades relacionadas con los meses de frío.
