El síndrome de aspiración meconial

El síndrome de aspiración meconial sucede cuando los bebés inhalan meconio durante o después del parto, y éste llega a los pulmones.
Todos los padres y madres que esperan un bebé desean tener un parto sin complicaciones, pero no siempre ocurre así. Uno de los trastornos que puede afectar a la salud de un recién nacido es la aspiración de meconio, también conocido como síndrome de aspiración meconial (SAM). Aunque puede ser grave, en la mayoría de casos no supone un problema importante.
El SAM puede ocurrir antes o durante el parto, cuando el bebé aspira una mezcla de meconio (sustancia viscosa y espesa de color verde oscuro a negro, compuesta por células muertas y secreciones del estómago y del hígado, que reviste el intestino del recién nacido. Son sus primeras heces) y líquido amniótico (el líquido en el que flota el niño dentro del saco amniótico).
El meconio inhalado puede obstruir parcial o completamente las vías respiratorias del bebé, dificultando su correcta respiración.
La gravedad del síndrome dependerá de la cantidad de meconio inhalado, del estado de salud del recién nacido, y de las afecciones que pudiera padecer previamente . En general, cuanto más meconio inhala un bebé, más grave es el trastorno.
De los bebés que expulsan el meconio durante el parto, entre el 2% y el 36% inhalan meconio dentro del útero materno, o bien en la primera respiración fuera del útero. De los bebés que nacen con el líquido amniótico manchado de meconio, el 11% presenta algún grado del síndrome.
¿Cuáles son las causas del síndrome?
El SAM suele relacionarse con el sufrimiento fetal que puede estar provocado por problemas durante el embarazo, como las infecciones, o por las dificultades que surgen durante el parto. Otros factores de riesgo para desarrollar el SAM son los siguientes:
- Un parto difícil.
- Una edad de gestación avanzada.
- Una madre que fuma mucho o que padece diabetes, hipertensión, o alguna enfermedad respiratoria o cardiovascular crónicas.
- Complicaciones relacionadas con el cordón umbilical.
- Escaso crecimiento intrauterino.
La prematuridad no es un factor de riesgo. De hecho, el SAM es muy poco frecuente en bebés de menos de 34 semanas de edad gestacional.
¿Cuál es su tratamiento?
Actualmente, si un bebé ha inhalado meconio pero se le ve activo, tiene buen aspecto y su latido cardíaco es fuerte, seguramente el equipo que asiste el parto sólo observará al recién nacido para detectar posibles signos de SAM, que suelen aparecer durante las primeras 24 horas.
Si el bebé ha inhalado meconio y da muestras de escaso nivel de actividad y tiene una frecuencia cardíaca baja, se le deberán desobstruir las vías respiratorias lo antes posible, mediante un tubo endotraqueal.
Los bebés con SAM pueden ingresar en una unidad de cuidados intensivos neonatales (UCIN) para que los puedan monitorizar y vigilar atentamente durante los días posteriores al nacimiento.
La mayoría de bebés con SAM mejoran en pocos días o semanas . Aunque pueden presentar taquipnea durante varios días tras el nacimiento, no suelen padecer lesiones pulmonares graves permanentes.
De todos modos, hay estudios que indican que los bebés que nacen con dicho síndrome tienen más riesgo de desarrollar una enfermedad reactiva de las vías respiratorias (pulmones hipersensibles con más probabilidades de acabar desarrollando asma).
Prevención
Si una mujer embarazada, al romper aguas, observa que su líquido amniótico es de un color verde oscuro, indicativo de la presencia de meconio, es muy importante que informe al médico.
También se utiliza la monitorización fetal durante el parto para observar la frecuencia cardíaca del bebé, por si éste presentara signos de sufrimiento fetal. En algunos casos, los médicos pueden recomendar la amnioinfusión para eliminar el meconio del saco amniótico antes de que el bebé pueda inhalarlo durante el parto.
Aunque el SAM es una complicación del parto que puede asustar bastante a los padres, la mayoría de casos no son graves. Si un bebé aspira meconio durante el parto, el tratamiento se aplica inmediatamente.
Fuente: KidsHealth