Los pechos y la práctica deportiva en las adolescentes

Para algunas niñas y adolescentes hablar de sus pechos sigue siendo un problema relacionado con la vergüenza, o al menos esta es la conclusión que se obtiene de un estudio que se realizó en el Reino Unido entre un grupo de chicas adolescentes de edades comprendidas entre los 11 y los 18 años.
Este estudio está basado en más de 2000 encuestas en las que se les preguntaba a las chicas temas tan variados como sus preocupaciones relacionadas con la salud de sus mamas, hasta si se sentían cómodas practicando deporte.
Falta de conocimiento sobre su cuidado
Respecto a esta última cuestión, las respuestas pueden dejar a más de uno perplejo por ser ciertamente preocupantes si lo asociamos a la importancia que tiene la práctica de actividad física y sus beneficios para la salud.
El 50% de las encuestadas responden que siente sus pechos como una barrera para la práctica deportiva y todas ellas solicitaban tener mayor educación y conocimiento respecto a complementos y prendas de ropa específicas para evitar posibles molestias y lesiones en las mamas, así como información sobre la salud directamente relacionada con éstas.
Es evidente que cada chica o mujer tiene unas características diferentes respecto a sus pechos, pero existen unas recomendaciones básicas para todas cuando se practica deporte y que puede beneficiarlas a todas por igual.
Recomendaciones para la práctica deportiva
El tamaño de las mamas suele ser la gran preocupación porque, dependiendo del deporte que se practique, puede resultar más o menos molesto e incluso, a nivel estético, puede ser un problema. En este sentido, llevar una correcta sujeción es esencial para evitar molestias y lesiones.
- En general son pocas las mujeres que llevan la talla y la sujeción adecuada. Es importante que la sujeción sea la correcta sin que comprima; hay que evitar el movimiento dentro del sujetador o del top para evitar lesiones cutáneas y musculares.
- Escoger el sujetador o top adecuado dependerá del tamaño de la mama y el contorno, así como del deporte que se pretende practicar.
- En deportes en los que hay impacto (en los que se corre y salta) lo más adecuado es que se mantengan las mamas lo más sujetas posibles. Si además de impacto hay contacto en el deporte que se practica, es importante valorar el almohadillado en la prenda.
- En el caso de las niñas que están en desarrollo, habrá que ir adaptando las tallas de manera progresiva.
- Intentar que el material textil del sujetador o top sea lo más traspirable posible.
Volviendo al estudio mencionado previamente, a las chicas encuestadas se les ofreció la información que solicitaban. Se les explicó que tops y sujetadores necesitaban llevar para evitar aquellas molestias que les podía impedir la práctica deportiva y a su vez se les dio educación sobre salud mamaria. Todo ello redujo la sensación de incomodidad que tenían, previo a la intervención, y les ayudó a relacionarse mejor con su cuerpo y la práctica de actividad física.