Paroniquia, una infección alrededor de las uñas que se puede prevenir

La mayoría de las veces, la paroniquia no tiene importancia y se puede tratar en casa. Para prevenirla, lo fundamental es evitar lesionarse las uñas y la piel que las rodea al máximo.
La paroniquia (también llamada uñero o panadizo) es la infección de la piel que hay de alrededor de las uñas de manos o pies. Cuando se daña esta piel, los gérmenes (que pueden ser bacterias u hongos) pueden entrar en su interior y provocar una infección. Es muy poco probable que se desarrolle paroniquia en los dedos de los pies (a no ser que se tenga una uña encarnada).
¿Cuáles son los síntomas de la paroniquia?
Se forma un área de piel alrededor de la uña que duele y que es sensible al tacto; lo más probable es que el área esté roja e hinchada y que se note caliente.
También es posible que se forme una ampolla llena de pus. Cuando se lleva mucho tiempo con la infección, la uña puede cambiar de color y/o de forma o parecer que se va a desprender de su lecho.
Tratamiento de la paroniquia
Las paroniquias leves que no se han empezado a extender más allá de la uña infectada se suelen poder tratar en casa. Sumergiendo la uña afectada en agua tibia durante 20 minutos seguidos varias veces al día, la infección se suele curar por sí sola al cabo de pocos días.
Si la paroniquia de tu hijo no mejora al cabo de aproximadamente una semana, deberías llamar a su pediatra. Si tu hijo tuviera un absceso (un área llena de pus en la piel o debajo de la uña) o si la infección se extendiera más allá de la uña, deberías llamar al médico de inmediato.
Aunque se trata de algo muy raro, una paroniquia grave no tratada se puede extender por todo el dedo y pasar a afectar al resto del cuerpo. Si ti hijo es diabético y percibes cualquier síntoma de paroniquia, informa a su pediatra incluso aunque la infección parezca leve.
No intentes pinchar ni cortar el absceso por tu cuenta porque podrías provocar una infección más grave u otras complicaciones. Es posible que el médico deba vaciar el absceso y recetar antibióticos a tu hijo. Si se trata de una paroniquia provocada por hongos, es posible que el pediatra recete a tu hijo cremas u otros medicamentos antimicóticos.
Cómo prevenir la paroniquia:
He aquí algunos consejos que pueden reducir las probabilidades de desarrollar una paroniquia tanto para ti como para tus hijos:
- Seguir unos buenos hábitos higiénicos, manteniendo las manos y los pies limpios y secos.
- No morderse las uñas ni estirarse de las cutículas que las rodean.
- No cortarse las uñas demasiado cortas. Hay que cortarse las uñas con corta-uñas o tijeras de manicura o pedicura, y alisar las esquinas con una lima. El mejor momento para cortarse las uñas es después darse una ducha o un baño, cuando las uñas están más blandas.
- No manipularse las cutículas, no cortárselas ni utilizar quita-cutículas.
- Si se va a tener que lavar muchos platos o las manos van a tener que estar en contacto con sustancias químicas, utilizar guantes de goma.
- Si se padece una diabetes, asegurarse de tenerla siempre bajo control.
- No usar sustancias químicas, como el pegamento, para ponerse uñas artificiales.
- Si se acude a un salón de manicura o de pedicura, considerar la posibilidad de llevar tus propios utensilios (corta-uñas, lima de uñas…).
Acceso a la fuente de consulta:
Paroniquia. KidsHealt. [Fecha de consulta: 10/05/2017]