Más de un 10 % de mujeres sufre depresión postparto

Hasta la fecha, muchas han sido las hipótesis de la causa de la depresión postparto. Ahora un estudio arroja nuevas ideas sobre su origen y expone maneras de prevenirla.
La depresión postparto es una forma de depresión que afecta a las mujeres después del nacimiento de un hijo. En general, se manifiesta a través de sentimientos de tristeza y una tendencia al llanto, aunque también pueden presentarse síntomas de depresión. Se considera que entre un 10 % y un 30 % de las mujeres sufren un proceso de depresión postparto.
Un acontecimiento que debería vivirse con alegría puede convertirse en una situación desesperante y angustiosa para la madre. Existe, pues, una contradicción entre lo que se espera de ella y lo que realmente siente. Hasta la fecha, muchos han sido los que se han preguntado las causas de este tipo de depresión, aunque pocas han sido las respuestas.
Ahora, un estudio publicado en Molecular Psychiatry arroja nuevas explicaciones sobre las causas biológicas de la depresión postparto, más concretamente sobre las causas genéticas que predisponen a sufrirla.
El estudio requiere realizar análisis genéticos y, de momento, los encargados de la investigación, de la Universidad Johns Hopkins de Estados Unidos, han realizado un ensayo a pequeña escala, con 52 mujeres. Los resultados fueron sorprendentes: los autores pudieron predecir que el 85 % de las mujeres participantes en el estudio desarrollarían el trastorno. Estos datos aportan nueva información a este proceso complejo en el que también influyen factores cognitivos, conductuales y psicológicos.
Según Antonio Cano, presidente de la Sociedad Española para el Estudio de la Ansiedad y el Estrés, las mujeres suelen ser más obsesivas y perfeccionistas que los hombres, y magnifican más las pérdidas y las amenazas. Esto hace que tiendan a preocuparse más, sobre todo ante la responsabilidad de cuidar a su bebé. Muchas madres se angustian y se sienten culpables, por ejemplo, al tener que darles el biberón en vez de leche materna.
A estos factores hay que sumarles los cambios físicos y hormonales que experimenta la madre. Además, existe el aspecto conductual; a las personas con depresión no les suele apetecer hacer nada y bajan su actividad, la motivación, el ocio, etc.
La investigación no se ha centrado tanto en los genes de estas mujeres sino más concretamente en la epigenética, es decir, en aquellos factores que hacen que un gen se active o no, y produzca por lo tanto una respuesta determinada. Esta propiedad es la base de las nuevas técnicas para obtener células madre a partir de otras células. Lo interesante de este nuevo enfoque es que el estilo de vida de la madre influye en la epigenética y, por tanto, la depresión postparto puede prevenirse.
Cómo prevenir la depresión postparto
Se resumen, a continuación, algunos consejos para minimizar la posibilidad de sufrir una depresión postparto:
- Asegurar la red social de la madre.
- Informar previamente a la mujer de lo que representa una depresión postparto.
- Animar a la mujer, siempre que pueda, a dar el pecho (se sabe que la lactancia materna previene la depresión postparto). Hay que facilitarle consejos y herramientas sobre cómo debe darse el pecho.
- Asegurarse de que la madre tenga un teléfono a mano.
- Si la situación lo requiere, tener a su disposición medicación para combatir el cansancio.
Referencia bibliográfica:
Hijos que traen una depresión bajo el brazo. El País, 2013 [acceso: 27 de junio de 2013].