¿Esperas gemelos? Resuelve aquí todas tus dudas

¿La ecografía revela que esperas gemelos? Seguramente aparecerán en tu cabeza mil y una preguntas como: ¿Hay que prestar alguna atención especial durante el embarazo? ¿Cómo será el parto? Y cuando nazcan, ¿Qué cuidados deberé tener en cuenta?
Un embarazo de gemelos significa, en general, una noticia que es acogida por los padres con especial ilusión y entusiasmo, aunque también aparecen muchas dudas: durante el embarazo, el parto, los cuidados de los primeros días de vida y a lo largo de su infancia en cómo educarlos.
Embarazo de gemelos: peculiaridades
El embarazo de gemelos no conlleva riesgos importantes, pero sí que hay que prestar algunas atenciones especiales durante la gestación:
- Mientras que los embarazos de un solo bebé requieren 300 calorías adicionales al día, la mayoría de expertos están de acuerdo que los embarazos de gemelos requieren aproximadamente 1.000 calorías adicionales al día.
- Las futuras madres deben tomar vitaminas prenatales con ácido fólico 3 meses antes de quedar embarazadas. El ácido fólico ha demostrado reducir las probabilidades de defectos del tubo neural como la espina bífida. Si aún no has empezado a tomar las vitaminas diariamente empieza ahora. Toma las vitaminas con alimentos para reducir las náuseas.
- Hidratarse correctamente. Es importante tomar suficiente agua durante el día. Puede ayudar tomar más agua temprano en el día y luego dejar de tomarla después de las ocho de la tarde para no tener que ir con tanta frecuencia al baño. La nutrición e hidratación correctas son importantes para su embarazo de gemelos.
- Prestar atención al cuerpo. Ante cualquier signo de anormalidad debe acudirse a la consulta del ginecólogo u obstetra. Por ejemplo, en el primer trimestre pueden aparecer sangrados vaginales por la implantación en la pared uterina. Aunque no son siempre un signo de alarma, consulta con el médico ante cualquier síntoma o duda.
Los gemelos corren un riesgo de parto prematuro mayor que en los embarazos de un solo bebé. Síntomas de ello pueden ser las contracciones (más frecuentes que en un embarazo normal), la presión pélvica y ocasionalmente la descomposición. Por ello, es importante empezar con antelación las clases de preparación para el parto. A la vez, también existe un riesgo más elevado de preclampsia, una afección en la que la madre tiene un aumento en la presión arterial, proteína en la orina (que se puede detectar por medio de un análisis de orina) y más sudoración de lo normal durante el embarazo.
Dependiendo de la gravedad de la situación, el tratamiento puede ir desde descanso en cama, hasta medicamentos administrados en el hospital, hasta el parto inmediato de los bebés.
Se aconseja, además, seguir una actitud optimista, relajada y tomarse las cosas con mayor calma.
Tras el nacimiento de los gemelos
Una vez que los pequeños hayan nacido, es importante que la pareja esté implicada y comparta la responsabilidad de cuidar a los pequeños. Adicionalmente, es mejor si aceptas cualquier ayuda que otros familiares puedan ofrecer.
Es muy normal, especialmente en la madre, que aparezca cansancio. No sólo físico, sino también emocional. De hecho, es probable que le cueste conciliar el sueño hasta varios días después del parto, por lo cual es recomendable aprovechar cualquier momento del día para el descanso.
Indudablemente habrá muchos sentimientos positivos, pero no es nada extraño que surja esporádicamente alguna emoción negativa. No hay que agobiarse ni sentirse culpable si aparecen estas emociones, es bueno compartirlas y dejar que sigan su curso de una forma natural. En la mayoría de casos los sentimientos negativos tendrán un muy corto recorrido. El diálogo con la pareja en todo momento, acerca de todo lo que concierne al momento de nacer de los niños, es fundamental.
A medida que se vayan haciendo mayores, evita vestirlos siempre del mismo modo y trátalos como lo harías si tuvieran edades diferentes. Ello les ayudará a adquirir más conciencia de la propia identidad. Evita a toda costa compararlos o que compitan entre ellos.
La gente tendrá tendencia a compararlos constantemente, por lo que te supondrá un esfuerzo adicional que los niños comprendan que eso no es lo normal. Es incluso recomendable, si es posible, que acudan al colegio en clases separadas.
Referencia bibliográfica:
Vaziri, S. ¿Está esperando gemelos? Cómo mantenerse saludable. Healthy Children. 2014