Toxoplasmosis: qué es y cómo prevenirla durante el embarazo
¿Qué es la toxoplasmosis?
La toxoplasmosis es una infección ocasionada por el parásito Toxoplasma gondii.
Es una enfermedad generalmente leve en personas con sistemas inmunológicos sanos que la mayor parte de las veces puede pasar desapercibida o confundirse con una gripe.
¿Por qué me debería preocupar por la toxoplasmosis?
Generalmente, si te infectas por Toxoplasma gondii antes de quedarte embarazada, creas inmunidad que protege al feto de la infección. Aunque no hay evidencia, los expertos recomiendan esperar unos seis meses después de haber tenido la infección por toxoplasmosis antes de buscar el embarazo.
¿Cómo sé si me he infectado por toxoplasmosis?
Los síntomas de la infección por toxoplasmosis son leves y a veces es difícil el diagnóstico porque se puede confundir con otras infecciones víricas, por lo que si tu médico duda si has tenido o estás teniendo la infección por toxoplasmosis, deberá realizar una serie de pruebas para confirmarlo.
¿Cómo se transmite la toxoplasmosis?
Los gatos juegan un papel importante en la transmisión de este parásito. Éstos se infectan por haber comido animales infectados como roedores o pájaros. Así, este parásito se excreta a través de las heces del gato hasta 3 semanas después de la infección. La probabilidad de transmisión depende en función de la edad, cuanta más edad tenga, menos se infecta. Accidentalmente, puedes entrar en contacto con estos excrementos a través de un recambio del cajón de arena del gato o en caso de practicar jardinería (los jardines son otro espacio donde acostumbran a defecar los gatos). Por el mismo motivo, las frutas y verduras pueden haberse cultivado en un cultivo infectado por toxoplasmosis, bien por la tierra o bien por el agua, en caso de no ser cocinados, pelados o lavados.
¿Debería dejar de tener gatos en casa si estoy embarazada o si estoy planificando una gestación?
No. Para poder convivir con él, deber seguir estas sencillas reglas:
Intenta no ser tu quien cambie la arena del gato. En caso de que no sea posible, deberías utilizar guantes de un solo uso y lavarte las manos con agua y jabón después de la manipulación.
Asegúrate que el recambio de la arena se haga diariamente. El parásito no inicia la capacidad infectiva a partir de 1 a 5 días después de defecar.
El alimento de tu gato debería ser comercial o en latas, no le des comida fresca o poco cocinada.
Mantener al gato dentro de la casa.
Aléjate de los gatos salvajes. No adoptes gatos mientras estés embarazada.
En caso de tener un arenero en casa, mantenlo cubierto.
En caso de practicar jardinería, mientras estés en contacto con la tierra, utiliza guantes.
Después, lávate las manos con agua y jabón.
En caso de infección, ¿hay algún tratamiento?
En caso de que padezcas una infección durante el embarazo, hay tratamiento disponible. En estos casos, se recomienda un seguimiento más intensivo durante el embarazo y, una vez que nazca el bebé, también tener más controles posteriores.
¿Cuáles son las mejores formas para protegerse contra la toxoplasmosis?
Además de las medidas descritas anteriormente, las propietárias y aquellas personas en contacto con gatos deberían seguir estos consejos descritos para reducir las posibilidades de entrar en contacto con el Toxoplasma:
Cocinar los alimentos a una temperatura segura. Un termómetro es la manera más adecuada para calcular el valor ya que hacerlo en función del color de la comida puede ser insuficiente. No todas las carnes se deben hacer a la misma temperatura:
Aves: se deben cocinar hasta los 74º y no requieren dejar reposar.
Resto de carne (porcina, bovina, ovina, conejo...): se debe diferenciar entre si el corte es entero o es carne triturada. En caso de cortes enteros, la temperatura es de 63º y se debe dejar reposar 3 minutos antes de ingerir; en cambio, si es triturada, de 71º y no necesita reposar.
Se debería congelar la carne un par de días antes de su ingesta por debajo de los 0º.
Pelar y limpiar las frutas y verduras a conciencia antes de ingerir.
Limpiar la tabla de cortar, platos, utensilios de cocina y manos con jabón después de haber estado en contacto con carne cruda, pollo, mariscos o fruta y vegetales no lavados.
Se debería evitar beber agua no tratada ni leche no pasteurizada de cabra ni comer mariscos frescos o poco cocinados.
¿Puedo amamantar a mi hijo si tengo una infección por Toxoplasma?
Sí. Es muy improbable que se pueda transmitir la toxoplasmosis a través de la leche materna. No hay ningún estudio que documente la transmisión por leche materna y con incidencias. Tan solo en caso de presencia de grietas o sangrado del pezón tres semanas después de la infección por toxoplasmosis habría un riesgo teórico de transmisión, pero éste sigue siendo muy bajo. Se debe de tener en cuenta las gestantes inmunodeprimidas que podrían tener el parásito más tiempo en su cuerpo.
Esta información es de carácter divulgativo y no sustituye la tarea de los equipos profesionales de la salud. Si necesitas ayuda, ponte en contacto con tu profesional de referencia.
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